• Para determinar el “núcleo del negocio” se deberá observar (i) el objeto social de la empresa; (ii) lo que identifica a la empresa frente a sus clientes finales; (iii) el elemento diferenciador de la empresa en el mercado; (iv) la actividad que genera valor añadido para sus clientes; y (v) la actividad de la empresa que suele reportarle mayores ingresos.
• De otro lado, la norma aplicará a las empresas que tercerizan actividades especializadas u obras que formen parte de la actividad principal pero que no formen parte del núcleo del negocio: (i) actividades especializadas: actividades vinculadas a la actividad principal de la empresa principal que exigen un nivel de conocimientos técnicos, científicos o particularmente calificados; y (ii) obras: encargo específico vinculado con la actividad principal, lo cual se encuentra debidamente descrito en el contrato civil suscrito entre ambas empresas.
• Se producirá la desnaturalización cuando:  (i) el desplazamiento de trabajadores no tenga como objetivo desarrollar actividades principales; y (ii) el desplazamiento de trabajadores se realice para el desarrollo de actividades que formen parte del núcleo del negocio.
• La consecuencia de la desnaturalización es que la empresa principal será considerada empleadora desde el inicio del desplazamiento, salvo prueba en contrario. Además de ello, se faculta a la Inspección del Trabajo a proponer la cancelación del registro de empresas tercerizadoras que incurran en desnaturalización, además de encontrarse en la posibilidad de imputar las infracciones que correspondan.
• Se establece un plazo de 180 días calendario de adecuación a esta disposición, a fin de que no se produzca la desnaturalización de la tercerización y el personal desplazado de la empresa tercerizadora no sea considerado trabajador de la empresa principal que contrate el servicio.

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